El Planetario de La Plata exhibió el último martes un meteorito que cayó hace 4 mil años en el territorio conocido como Campo del Cielo. La presentación del evento estuvo a cargo de la Facultad de Ciencias Astronómicas y Geofísicas (FCAG) de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), donde se pudo observar la pieza cedida en comodato por el Gobierno de la provincia de Santiago del Estero. La jornada contó con la presencia del gobernador Gerardo Zamora y los presidentes de la UNLP, Martín López Armengol, y de la Universidad de Santiago del Estero (UNSE), Héctor Paz.
El principal impulsor del vínculo entre las dos casas de estudios es el astrónomo, Daniel Del Cogliano, quien dialogó con Laboratorio de Ideas, por Radio Provincia. Al respecto, dijo que “Campo del Cielo es la zona que se conoce como el espacio donde se distribuyó una lluvia de meteoritos hace 4 mil años y que tiene una extensión de unos 100 km de largo por algunas decenas de ancho”. Explicó que “ese lugar, actualmente, está partido por el límite político de las provincias de Chaco y de Santiago del Estero”.
A su vez, el docente de la FCAG señaló que “la colaboración entre las universidades trasciende a este proyecto y tiene toda una historia en el campo de la geomática”. En ese marco, advirtió que “para la astronomía argentina, Campo del Cielo es una deuda, porque nunca se realizó un estudio integral”, motivo por el cual “sentimos casi una obligación encarar este proyecto”.
El entrevistado destacó la importancia de conservar el patrimonio. En tal sentido, indicó que “hay un conjunto de personas que desde hace muchos años roban meteoritos para venderlos, y son ellos quienes más saben del tema”. Por lo tanto, consideró que “para encarar una política de resguardo, hay que conocer dónde y cómo están” y la colaboración de la UNLP con la UNSE “apunta a estudiar dónde están los cráteres o restos de cráteres que aún podamos detectar y dónde están los meteoritos que se encuentran bajo tierra”. En ese estudio, adelantó que “también queremos realizar el análisis del fenómeno astronómico porque habla de la historia de nuestro sistema solar”.
El experto indicó que “para encontrar los restos de meteoritos aún enterrados, primero tenemos que encontrar la presencia de cráteres y eso se hace con un escaneo láser que se realiza desde un avión, que tiene la virtud de penetrar la vegetación”. Informó que “de ese análisis vamos a poder saber dónde estar los cráteres y con métodos geofísicos para buscar metales que justifiquen una eventual excavación”.