Luciana De Luca visitó los estudios de Radio Provincia para participar del programa ‘El Tenedor de Libros’. Allí conversó con otro entrevistado, el cocinero japonés que vive en Argentina Takehiro Ohno.
Al hablar de su obra, explicó que si bien empezó con la literatura para adultos, muchos la conocen por sus producciones para chicos. Sobre su último libro ‘El amor es un monstruo de Dios’, afirmó que “es la mirada infantil y asombrada, hay algo de la racionalidad corrida para dejar la sensibilidad en primer plano. Se manifiesta en la presencia litoraleña, un sesgo que no puedo evitar”.
En tanto, significó que “siempre terminé sintiendo que no era de ningún lado. Cuando venía a Buenos Aires era la santafesina, con mi tonada, y en Santa Fe era la porteña. Eso me permitió apropiarme de una ajenidad y salirme, era una especia de observadora como omnisciente que podía mirar en los dos lados, pero sobre todo en Santa Fe, que es donde más me sentía juzgada”.
"Para mi la literatura es la entrega completa al texto, trato de que haya absoluto compromiso con ese texto. Hay algo de razón de ser y luego está la generosidad de alguien que te quiera leer. Pero hay un lugar al que no llego si no es con la literatura", afirmó.
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