Francisco "Paco" Oliveira, sacerdote que integra la congregación de curas en Opción por los Pobres describió que en los barrios populares “cada día estamos peor” porque si bien “la inflación es menor" a la registrada a inicios de la gestión libertaria "esto no sirve si no tenés plata para comprar”. “La realidad es que los precios están por las nubes, la gente no tiene un peso y está comiendo salteado. Y hay una falta de Estado que es realmente alarmante”.
El sacerdote relató: “Siempre viví con mis hermanos y hermanas pobres en una asentamiento. Pero ahora mis vecinos son indigentes y eso es un cambio absoluto. Antes la pasaban mal, pero había determinadas cosas. Ahora, ni si quiera se come”.
El Observatorio de la Deuda Social de la UCA reportó que hay un 49.9% de pobres y un incremento de la indigencia ya que este indicador pasó de 11.9% en 2023 al 12.9% en el tercer trimestre de este año. Además, reveló que el 29.4% de los hogares debió recortar el gasto en medicamentos, cuando el período medido todavía no registra el impacto de la baja del programa de medicamentos gratuitos del PAMI. El 29.9% no pagó tasas o impuestos y el 27.1% no ha podido pagar algún servicio básico.
En contacto con “Es Un Montón” por Radio Provincia, señaló que "antes, por lo menos estaba el comedor para retirar viandas, pero hoy todas esas cosas están en su mínima expresión o cerrados por las políticas de gobierno y por cuestiones absolutamente ideológicas: odio a las organizaciones sociales”.
Además el sacerdote alertó sobre “el aumento de demandas que antes no teníamos” y ejemplificó con el incremento en materia de “remedios y medicación” porque son pedidos que “van en aumento”.
“Antes, más o menos y sin que estuviéramos en la gloria, podías comprarte algunos medicamentos. Hoy el paracetamol es muchísima plata, cargar una garrafa también. Todos los programas sociales que mejoraban en algo la vida a la gente, se fueron cerrando como es el caso de la garrafa social. La situación es muy catastrófica”, relató.
Seguido Oliveira retomó las palabras de Marcelo Colombo, el actual presidente de la Conferencia Episcopal Argentina a quien definió como “un cura de barrio y un tipazo”. Y coincidió con él en que “la economía sirve pero con la gente adentro. Con la gente afuera le sirve a la oligarquía y a la gente poderosa", y consideró que con las medidas tomadas "estamos haciendo un país donde más del 50% de la población se queda afuera". Alertó que, en este contexto, "claramente hay alguien que se está quedando con lo que le pertenece a este más de 50%”.
Por eso, estimó que “lo único que podemos hacer es luchar primero para que este gobierno termine lo más rápido posible. Y luego para que no siga habiendo políticos que se presentan por un partido que defiende la justicia social y luego se terminan vendiendo, como Scioli o Kueider, que lo único que les interesa es el poder y el dinero”.
Respecto de la celebración de las fiestas en los barrios populares, el sacerdote explicó que desde el grupo que integra “todos los años intentamos acompañar a nuestra gente para que algo podamos tener para celebrar porque la vida no es solamente comer un plato de fideo. Pero, se hace difícil porque los recursos son cada vez más limitado y las necesidades cada vez más grandes”.
Finalmente, informó que "después de 5 fallos judiciales", el Gobierno “tuvo que aportar lo que correspondía en uno de los comedores. Y para el otro nos dieron una tarjeta de débito pero esperamos que nos depositen”. Paralelamente señaló que la administración nacional "sigue recurriendo" los fallos pese a que es un proceso oneroso porque “para eso hay dinero” ya que lo pagan "con la nuestra".