Marcos Aldazabal, uno de los representantes legales de exmandataria en la causa que investiga el intento de magnicidio, recordó que los discursos violentos de Javier Milei “ya generaron una situación específica contra Cristina Fernández que, de milagro, no se materializó” el 1 de septiembre de 2022. Y paralelamente entendió que “es una situación sumamente grave insistir con estos discurso violentos, que es lo que hace todos los días”, y aún más “hacerlo contra Cristina y siendo tan explícito, respecto de ponerla en un cajón y poner el último clavo. Esto no se puede pensar sólo como pura inconciencia o como herramientas retóricas de un discurso porque él es el Presidente de la Nación y no podemos estar presumiendo que todo lo que dice es porque está inestable”.
En contacto con “Naplam”, por Radio Provincia, el abogado explicó que “los orígenes de la libertad de expresión no están pensados para defender al Presidente insultado o amenazando gente” sino que está fundamentalmente dirigida a “las conversaciones en los medios para que la población pueda mantenerse informada”. Y paralelamente acusó a Javier Milie, de “generar un caldo de cultivo” para que proliferen acciones violentas en la sociedad.
Asimismo, el letrado señaló: “Lo que venimos viendo en la causa que investiga el intento de magnicidio de Cristina Fernández y, al mismo tiempo, lo que también marcan muchos estudios académicos es que este tipo de expresiones y de violencia retórica tiene un potencial enorme para convertirse, después, en violencia física”.
Seguido, Aldazabal puntualizó que además, “una cosa eran los discursos de Milei de este estilo, pero otra cosa son estos mismos discursos después del atentado contra Cristina; porque ambos son muy graves y repudiables, aunque ahora, luego de que en el juicio -y en otros estudios académicos- se ve el impacto concreto que tuvieron; al volver a insistir, no puede ampararse en el 'yo no lo sabía' o 'son metáforas' porque 'hay numerosa prueba' de que este tipo de discursos generan situaciones de violencia en la sociedad”. Y ejemplificó que en el juicio en el que se investiga el intento de magnicidio se puede ver “cómo estas expresiones influyeron tanto en Brenda Uliarte como en Fernando Sabag Montiel”.
Por otra parte, también desestimó la defensa retórica que se esgrimió al señalar que la advertencia de Milei respecto de que sus dichos son “una metáfora, pierde el punto” porque “efectivamente es una metáfora pero el tema es cómo ésta influye en las conductas de otras personas”.
Y concluyó: “Lo que estamos diciendo es que obviamente él no va a poner un clavo en un cajón". No obstante, aclaró que "a través de esas formas de comunicarse genera un caldo de cultivo para que todo esté más violento" e insistió que esta situación es más grave aún porque estos discursos apuntan "contra una persona contra la que ya atentaron”.