Hugo Yasky, diputado nacional y secretario general de la CTA habló con Napalm en Radio Provincia AM1270 tras la realización de la segunda marcha universitaria y, en ese sentido, señaló que "fue una demostración conmovedora del compromiso de nuestro pueblo con la Educación Pública". Además, destacó que "predominó la presencia juvenil y de trabajadores" y subrayó que "los argentinos le dieron una lección enorme a este Gobierno y a quienes lo apoyan desde el poder financiero y económico".
A su vez, dijo que "la defensa de la educación pública no puede ser discutida en ninguna mesa. La marcha de ayer fue más numerosa que la de abril, y esto va a ir en ascenso". Y, sobre el comunicado presidencial que deslizó que no fue una convocatoria genuina, sino la evidencia de la construcción de un frente de izquierda populista, expresó que se trata de “un relato absurdo, ridículo, que expresa esa embestida ciega de todo lo que representa el Presidente”.
Asimismo, opinó que tales declaraciones “no reflejan lo que piensan los que votaron a Milei. Están en una posición más cerrada, más obtusa, es un intento desesperado por tratar de descalificar de cualquier modo, algo que a los ojos de la inmensa mayoría de los argentinos, es muy claro: hay que defender la universidad y la escuela pública, porque es la posibilidad de construir movilidad social ascendente”.
Respecto de la postura que tomarán frente al veto a la Ley de Financiamiento Educativo, remarcó que "es probable que la semana próxima la Cámara de Diputados esté sesionando. Distintos bloques van a pedir la convocatoria a la sesión, y va a ser una prueba para aquellos que tienen muchas veces un doble discurso". Seguido, indicó que la convocatoria "va a ser una especie de test donde se va a determinar quienes están realmente dispuestos a sostener la defensa de algunas banderas que el pueblo argentino no quiere entregar”.
Sobre los diferentes dirigentes políticos que participaron de la marcha, comentó que “hay un punto de inflexión a partir del cual el gobierno de Milei empieza a retroceder en el apoyo que se lograba hasta antes del veto a la movilidad jubilatoria y hasta antes de que se planteara el conflicto con la universidad y los recursos para la escuela pública. Que aparezcan algunos de estos personajes que hasta ahora habían estado abajo de las baldosas, es una señal de eso".
"Es algo positivo porque es el registro de que las cosas están cambiando y no es como nos quieran hacer creer que este Presidente va a poder hacer cualquier cosa y todo le va a salir gratis. Hay una suerte de cambio cultural. Ayer fue una jornada maravillosa. La foto que vimos nosotros recorrió el mundo y muchos están preguntándose si estas muestras que están haciendo, sosteniendo a un Presidente que empieza a gobernar en contra de lo que la inmensa mayoría de pueblo argentino pide, es sostenible y estas presencias en la marcha hablan de eso. Empieza una cuenta regresiva”, subrayó.
Respecto del proceso de reunificación entre la CTA y la CTA autónoma, sostuvo que “el trabajo viene con mucha potencia. Ayer marchamos juntos, no es la primera vez que lo hacemos. La unidad no es solamente matemática, es el gesto, la señal que generó mucha esperanza y expectativa. Vamos a seguir trabajando para poder consolidar eso con el objetivo que nos planteamos que es tratar de construir un espacio en condiciones de convocar para que la decisión que tomaron algunos dirigentes de la CGT de dialogar, poner en modo pausa la protesta, pueda ser llenada con la convocatoria desde estas dos CTA que hoy se unifican”.