En diálogo con El repaso, Feletti dijo en relación a la caída del consumo que “cuando se habla de un reacomodamiento de precios, seguramente están perjudicando a los salarios, y eso explica la caída del consumo”.
En ese sentido, amplió “el pronóstico es ominoso” ya que “el propio gobierno cuando presentó el presupuesto da una caída de 3% del Producto Bruto”. Además, “técnicamente hay una falacia, porque los precios al final del gobierno del Frente de Todos ya tenían un índice razonable en relación a la rentabilidad de las empresas. El gobierno incentivó este proceso, acompañando con un recorte del gasto público muy fuerte y una devaluación”.
En función de ello, “ese reacomodamiento de precios le jugó en contra de ganar competitividad, juntar dólares. También le juega en contra en las cuentas públicas, porque la caída del consumo afecta a impuestos como el IVA que está vinculada con la actividad económica, por eso celebran los aumentos tarifarios, porque tiene superávit en el sector externo, pierde en el interno, y se pierden reservas de dólares. O sea el plan de Caputo, es un fracaso, pero eso no exime de que haya habido una transferencia de los salarios de los trabajadores hacia el sector financiero”.
Luego, sobre el impacto inmediato que tendrá el aumento de combustibles, adelantó que “es multiplicador del incremento de precios, porque es un costo para las empresa productoras, un costo para las empresas de servicios que se dedican a logística y movilidad” y eso “va a terminar fijando un piso de inflación que estará en torno al 4%, lo que muestra que el esfuerzo del gobierno de cambiar inflación por desempleo, como en la convertibilidad no había inflación pero el desempleo llegaba a los dos dígitos”.
Finalmente explicó que “la emisión del salario registrado desde que asumió Milei hasta el 30 de junio, perdió un 11% promedio. Si vamos a los trabajadores no formales y cuentapropistas, ese impacto es mucho mayor, porque no tienen paritarias, y si estamos en un proceso recesivo menos capacidad de trasladar a precios, lo que provoca una situación de desahorro, como dice impunemente Caputo, que es la apuesta el gobierno”.