En diálogo con “Todo este Ruido”, Luciano Galfione, presidente de la Fundación Pro Tejer, que se dedica a la industria textil, aseveró que la producción en “nuestra cadena de valor viene complicada desde inicios de este año”. Remarcó que “venimos con una utilización de la capacidad instalada del 40%, 6 de cada 10 máquinas en nuestras fábricas las tenemos paradas y con estos niveles de producción no es compatible con ninguna industria rentable y esto repercute en los puestos de trabajo”.
En este mismo sentido, reconoció que la caída del consumo y las ventas de los productos tienen que ver con la pérdida del poder adquisitivo de la población y con la actualización de tarifas “lo primero que restringe a una familia es la indumentaria”.
Al mismo tiempo, destacó que “puertas afuera de nuestra fábrica nos encontramos con esta maraña donde todo es caro y con precios que no son competitivos
Por otra parte, al referirse a las importaciones de productos dijo que “el 50% del mercado textil argentino es importado. Al mismo tiempo que la eliminación de controles en aduanas y licencias que controlaba el INTI, permiten que vengan productos importados de manera ilegal pagando menos impuestos”.
Por último, destacó que desde hace tiempo “advertimos que para eliminar la burocracia sacaron la norma y los controles (...) Hoy en Argentina no se vende nada, ni nacional ni importado”.